Cantalicio: cuatro generaciones y dos trágicas muertes en una querida familia de Moraleja

Moraleja era un municipio consternado en la jornada de este martes. En menos de 12 horas habían perdido a tres vecinos de la localidad en un lunes negro que se había convertido en una de sus jornadas más luctuosas. Sin duda, el trágico suceso por el que perdió la vida Cantalicio Méndez Gutiérrez, ‘Canta’, fue el que más consternó a los vecinos de la localidad. El hombre de 62 años falleció mientras trabajaba en la empresa Productos Silvestres Julián Martín, situada en el polígono industrial El Postuero, al caerle encima la carga de una carretilla elevadora, según informó el Centro de Urgencias y Emergencias 112. Pero no fue el único caso: otras dos mujeres mayores también fallecieron por la mañana y fueron enterradas en la jornada del martes. 

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En el caso de ‘Canta’, la mañana fue de muchas dudas. El cuerpo había sido trasladado al Instituto Anatómico Forense de Cáceres y no se supo cuándo sería el entierro hasta pasadas las 2 de la tarde. Finalmente, será este miércoles a las 11.00 horas en la Iglesia Parroquial Nuestra Señora de la Piedad de Moraleja. Posteriormente se trasladará al cementerio municipal para su inhumación.

Habitual en las asociaciones

Además de su reciente afiliación al PSOE, ‘Canta’ era un habitual en el mundo asociacionista de la localidad moralejana. Fue uno de los fundadores de la Asociación de Empresarios ‘Rivera de Gata’, donde ayer aún no podían creerse lo que le había ocurrido a su compañero. Formó parte de las primeras directivas de la entidad y participaba de forma activa en la organización de la Feria Multisectorial. También fue el presidente de la Entidad para la Conservación del Polígono en el que se encontraban el taller mecánico donde trabajaba. Según cuentan fuentes, este cargo se repartía de una forma similar a una comunidad de vecinos, donde cada año se nombra a un nuevo cargo. El objetivo de la entidad es promover, dinamizar y desarrollar el lugar en el que trabajaban.

En la empresa donde se produjo el accidente laboral se había vuelto a la normalidad apenas 14 horas después del suceso. La entidad, en la que trabajan aproximadamente una veintena de personas en estas fechas -suele aumentar en otras temporadas del año-, prefirió no hacer ningún tipo de declaraciones sobre el suceso. Por el momento, se desconoce cómo fue exactamente la situación que provocó su muerte y si pudo existir error humano o en la maquinaria que estaba utilizando. Los técnicos del Centro Extremeño de Seguridad Laboral e inspección de la Dirección General de Trabajo que se trasladaron al lugar de los hechos trabajaron para dictaminar qué pudo ocurrir. También se desplazaron los efectivos del Servicio Extremeño de Salud y la Guardia Civil.

La historia de Cantalicio

Cantalicio era una persona conocida en el pueblo porque se había dedicado siempre al arreglo de vehículos. Su madre, de nombre Esperanza, procedía de una familia que tenía fincas en la zona del embalse de Borbollón. Se enamoró del padre del fallecido, también de nombre Cantalicio. Este era el encargado de tocar el acordeón en la orquesta Tropicales en los años 50. Como curiosidad, hasta cuatro generaciones llevaron el nombre Cantalicio: el hombre fallecido este lunes, su padre, que también murió hace unos años, su abuelo, fusilado durante la Guerra Civil, e igualmente su hijo, que tiene un taller en el polígono industrial La Cañada de Moraleja.

Esperanza siempre fue una apasionada del mundo de la política, pero nunca le permitieron ser partícipe de un partido por temor a lo que le había ocurrido al padre de su marido. Cuando éste falleció, decidió incorporarse a las filas del PSOE y entró en la candidatura de César Herrero, actual alcalde de Moraleja, pero no llegó a obtener los votos suficientes para ser concejala. Murió hace unos meses, con más de 90 años. 

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